CINEMINUTOS CONTRA LA CORRUPCIÒN

LA CORRUPCIÒN DEBE ELIMINARSE POR QUE ESTA:

Distribuye desacertadamente los recursos Con frecuencia, recursos que podrían dirigirse hacia la producción de bienes y servicios, se desvían hacia la corrupción. Esto incluye tanto los recursos directos involucrados en las transferencias de dinero como los recursos indirectos, por ejemplo, el mantener contactos con funcionarios gubernamentales o que se otorgue una licencia de operación o de producción a una firma menos eficiente. La corrupción también distribuye desacertadamente recursos que de otra manera podrían usarse para el suministro de servicios públicos. Fomenta políticas y reglamentaciones desacertadas e insensibles En los sistemas corruptos, los legisladores con frecuencia generan políticas y reglamentaciones cuyo propósito no es mejorar el entorno económico o político en general. Más bien, benefician a unos pocos allegados a los responsables de adoptar decisiones o a aquellos que sobornan a funcionarios gubernamentales para que aprueben una reglamentación favorable. Reduce los niveles de inversión La corrupción tiene efectos negativos tanto en los niveles de inversión extranjera como interna. Los inversionistas terminan por evitar los entornos en que la corrupción es rampante porque ésta aumenta el costo de las transacciones y socava el estado de derecho. La corrupción con frecuencia está relacionada también con un grado alto de incertidumbre, algo que siempre ahuyenta a los inversionistas. Reduce la competitividad y la eficiencia Los funcionarios del gobierno que exigen sobornos para proveer o denegar servicios tales como la adjudicación de licencias o permisos, limitan el número de las firmas capaces de entrar en el mercado, creando con ello un entorno de "buscadores de beneficios", que obliga a las compañías que no están dispuestas o no están en condición de pagar sobornos a participar en la economía informal. Reduce los ingresos públicos destinados a bienes y servicios esenciales La evasión fiscal, uno de los problemas que amenaza más al flujo de los ingresos del gobierno, es muy generalizada en los países corruptos porque las firmas que operan en la economía informal no rinden informes sobre sus ganancias y por lo tanto no pagan impuestos. Al mismo tiempo, las firmas que operan en la economía formal pagan sobornos en lugar de impuestos cuando la administración tributaria es corrupta o cuando está muy generalizado el abuso de las leyes tributarias. Aumenta los gastos públicos Los proyectos de inversión pública brindan en muchos casos oportunidades para que los funcionarios gubernamentales reciban sobornos. Sencillamente, los funcionarios del gobierno, frente a la posibilidad de beneficiarse directamente al adjudicar contratos a amigos, promoverán tantos proyectos de inversión pública como les sea posible. Reduce la productividad y desalienta la innovación En los sistemas corruptos, las personas y las firmas gastan tiempo y recursos dedicados a la corrupción (al pagar sobornos, cultivar relaciones con funcionarios corruptos, etc.) en lugar de dedicarse a actividades que promuevan su crecimiento. Asimismo, la corrupción desalienta a que se hagan innovaciones, dado que los sistemas corruptos carecen de las instituciones jurídicas que protegen los derechos sobre la propiedad. Aumenta el costo de las transacciones comerciales (actúa como un impuesto sobre las empresas) El tiempo y el dinero que se gasta en sobornar a los funcionarios gubernamentales y en resolver materias reguladas por complejas reglamentaciones aumentan el costo de los negocios. Este costo, o se transfiere al consumidor por medio de aumentos en el precio o reduciéndose la calidad del producto, o actúa como una barrera para que las firmas no entren en el mercado. Reduce los niveles de crecimiento La corrupción perjudica a las empresas pequeñas debido a que a éstas les es más difícil que a las firmas más grandes sostener el alto costo de la corrupción (tiempo y dinero). Generalmente, las firmas pequeñas carecen de poder para evitar la corrupción, tienden a operar en entornos altamente competitivos y, por lo tanto, no pueden pasar el costo de la corrupción a sus clientes. Reduce los niveles de empleo en el sector privado Al obligar a la empresa a operar en el sector informal, creando barreras a su entrada en el mercado y aumentando sus costos de operación, la corrupción reduce en efecto los empleos en el sector privado porque las firmas son menos propensas a crecer y a expandirse. Reduce el número de empleos de calidad en el sector público Con frecuencia, los gobiernos corruptos ofrecen muchos empleos de salarios bajos para favorecer a votantes claves. Asimismo, en los sistemas corruptos la calidad de los empleos públicos sufre porque los funcionarios gastan recursos en obtener sobornos en lugar de proveer servicios. Por ejemplo, en muchos casos, en las oficinas que adjudican licencias, los funcionarios públicos simplemente demoran el trámite de expedir la licencia si no reciben pagos o regalos adicionales. Agrava la pobreza y la desigualdad La corrupción reduce el potencial de los pobres de ganar dinero porque existen menos oportunidades en el sector privado. Además, la corrupción facilita la desigualdad al limitar los gastos en servicios del sector privado, y limita el acceso a recursos esenciales como el cuidado de la salud y la educación Socava el estado de derecho La corrupción crea una cultura en la que los funcionarios del gobierno no están obligados a rendir cuentas por sus acciones. Además, en los sistemas corruptos no se aplican en forma constante y justa las leyes y las reglamentaciones que existen en los códigos. Por lo tanto, no es la ley la que cuenta sino a quién se conoce y cuánto se está dispuesto a pagar. Impide las reformas democráticas orientadas al mercado Para tener éxito en establecer economías de mercado y sociedades democráticas, los países deben crear y desarrollar instituciones que faciliten la aplicación de la ley y aseguren un proceso decisorio transparente e inclusivo. En los sistemas corruptos, es difícil crear instituciones acertadas y bien concebidas. Aumenta la inestabilidad política La corrupción generalizada contribuye a la inestabilidad política porque se alienta a los ciudadanos a desalojar a los líderes corruptos que no pueden representar eficazmente los intereses del pueblo. Contribuye al aumento de la delincuencia La corrupción fomenta un sistema que hace caso omiso del estado de derecho y crea una sociedad en la que son inefectivas las instituciones jurídicas, judiciales y de aplicación de la ley. En los sistemas corruptos, a los ladrones les es fácil comprar la evasión de su castigo. La corrupción no solamente conduce a la delincuencia política e institucional, sino que fomenta también el crimen organizado.

¿POR QUÈ SE DEBE LUCHAR CONTRA LA CORRUPCIÒN?

En muchas economías, la corrupción es institucional y parece ser más cómodo tratar con ella diariamente que combatirla. Percibir la corrupción como un problema económico significa que ésta es algo más que una simple conducta inapropiada. Significa que la corrupción, si bien beneficia a algunas personas, a la larga es costosa para la sociedad, para el sector privado y para los gobiernos.
http://redescolar.ilce.edu.mx/educontinua/educ_civica/La_Gracia/Corrupcion/Corrupcion.htm

¿DESDE CUANDO SE HA DADO LA CORRUPCIÒN?


La corrupción se ha dado desde tiempos remotos, desde la colonización española para ser exactos, en dónde los pobladores de las tierras americanas ofrecían oro y riqueza a los españoles, a cambio de protección o de inmunidad. A pesar de que ellos no sabían el tipo de acto que estaban haciendo, la corrupción se daba.

De ahí se fueron dando más y más actos de corrupción, y como en el caso anterior no sabían el nombre del acto, hasta mucho después cuando fue acuñado este termino, pero para eso paso mucho tiempo, pero los actos siguieron a través de la historia dándose, hasta llegar a nuestros días, en donde está por demás sabido qué es la corrupción, quedando impunes estos actos debido a nosotros mismos.

Esta tendencia se presenta y existe en todo tipo de organizaciones, en dónde los prestadores de servicios se aprovechan de las facultades que tienen para sacar provecho de tipo económico a todo tipo de personas susceptibles a sus circunstancias y situaciones.

Sin embargo mucho se ha intentado hacer para combatir este mal que desquebraja la sociedad de una manera voraz, dando resultados poco notorios.

CINEMINUTOS - COCHINADAS

LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN

La corrupción es un problema que afecta gravemente la legitimidad de la democracia, distorsiona el sistema económico y constituye un factor de desintegración social. De ello son conscientes los Gobiernos del Hemisferio y han “iniciado” a promover y ejecutar acciones que aseguren la erradicación de este flagelo.

La lucha contra la corrupción es tal vez uno de los campos en los cuales la acción colectiva de los Estados es no sólo útil y conveniente, sino absolutamente necesaria.

CAUSAS CULTURALES


Antes de presentar estas causas es necesario señalar que el concepto que se maneja hace referencia a la cultura política de un país, es decir: "el conjunto de actitudes, normas y creencias compartidas por los ciudadanos y que tienen como objeto un fenómeno político (en este caso la corrupción)". Las condiciones culturales permiten así delimitar la extensión de las prácticas corruptas, la probabilidad que se produzcan y el grado de tolerancia social con que pueden contar.

Son cuatro condiciones culturales básicas:

•La existencia de una amplia tolerancia social hacia el goce de privilegios privados; permite que prevalezca una moralidad del lucro privado sobre la moralidad cívica.

•La existencia de una cultura de la ilegalidad generalizada o reducida a grupos sociales que saben que "la ley no cuenta para ellos" fomenta la corrupción y la tolerancia social hacia ella.


•La persistencia de formas de organización y de sistemas normativos tradicionales, enfrentados a un orden estatal moderno, suele provocar contradicciones que encuentran salida a través de la corrupción.

•Para algunos casos latinoamericanos, ciertas manifestaciones corruptas podrían explicarse por la escasa vigencia de la idea de nación y la ausencia de una solidaridad amplia fundada en el bienestar común.